Entradas

Mostrando entradas de febrero, 2016

El amor y el puerto de Cartagena

Imagen
No es necesario que me ates en tu puerto, yo misma elijo ir a él y quedarme largo tiempo. Desde él puedo ver el mar y disfrutar de su libertad. La brisa me da en la cara y me hace cosquillas al hacer bailar levemente mi pelo. En él no me siento sola. No eres sólo tú, otra gente aparca en él, se queda un tiempo  y se va. Es bueno disfrutar esa compañía. El ondear de las olas recuerdan al amor que siento por ti, a la danza de emociones que invade mi mente al pensarte. De ti surge un halo de luz que enternece todo aquello que te rodea, como impregnado de tu perfume. Y una fuerza me atrae hacia a ti como si tiraran de mí de una fuerte cuerda, que me invita a mirarte sin parar. Una parte de mi se apacigua con tu presencia, los problemas parecen lejanos y el panorama se muestra apacible. Como en una tarde de verano entro en un profundo aletargamiento cuando con tus rayos me iluminas. Y ese confortable calor me invita a ir a tu lado,